La trayectoria de los antepasados ha sido el despacho de carnes, por medio de la venta ambulante  en pueblos cercanos a Burgos. Esta labor es muy estacional, concretamente estival, de todos es sabido que el invierno en Burgos es muy largo ¿qué hacían? la matanza del cerdo. Así fue, como la sabiduría y el buen hacer de nuestros padres y abuelos respecto a matanza fueron de boca en boca,(nunca mejor dicho),y esto  nos a traído hasta hoy.

Basados en el éxito de la tradicional matanza de nuestros pueblos,  se fundamenta la inversión para construir una industria artesana conservando los viejos sabores, y cumpliendo con las últimas normas sanitarias, para conseguir los productos de máxima calidad.

La demanda existente de productos cárnicos de tipo artesano, cual es la producción de morcilla, chorizo, jamón, … y demás productos típicos de la matanza del cerdo, no solo en la plaza de Burgos sino en las limítrofes es el objeto principal de la creación de esta pequeña industria artesana de fabricación de embutidos.